Hoy quiero hablaros de las
balanzas. Esta mañana Luis Felipe Tellez Manzanares hacia un comentario en el
álbum de conferencias de SOFIMA en Facebook a raíz de esta imagen, que
pertenece a la conferencia que impartió Jesús Trello el 10/06/2012, titulada la
Correspondencia con el Más Allá- Carta a los Difuntos, para leerla pulsa eneste enlace.
Luis Felipe comentaba que
los egipcios inventaron en el año 3500 a.c, un instrumento esencial para el
futuro de correo y el franqueo con sellos por el peso de las cartas (1840), la
balanza o la báscula.
Esta imagen es una
representación egipcia del juicio que se le realizaba al hombre cuando fallecía
donde se pesaba sus actuaciones (corazón) con
respecto al concepto del mat (lo justo) que se solía representar con una pluma.
Pero hoy no
quiero hablaros de este concepto hoy quiero hablaros de las balanzas franqueadoras, pero por su extensión vamos a dividir el artículo en dos partes
Cuando he leído
el comentario de Luis Felipe he recordado cuando hace unos años, podías ir a
una oficina de correos te pesaban la carta en una balanza y en función del peso
y del destino, te emitían un sello de valor variable con la tarifa, e incluso
en ocasiones podía ir incluido el peso del envío.
¿Pero cuando
y como apareció la balanza? El comercio desde tiempos remotos ha sido muy
importante, pero para intercambiar los distintos productos se tuvo la necesidad
de pesarlo, por ello en torno al 3500 a.c, los egipcios inventaron la balanza.
La balanza
egipcia, como la que muestra la imagen, estaba formada por una columna con un
astil sujeto con una cuerda, y en los extremos se situaba mediante cuerdas unas
bandejas, en una se colocaba la mercancía y en otra las pesas. En torno al año
1500 a.c los egipcios mejoraron el sistema mediante una plomada para verificar
que estuviera nivelado las pesas.Este sistema se extendió por el mediterráneo
Por otro
lado los romanos en torno al año 200 idearon otro tipo de báscula conocida como
la romana de gancho, que fue el antecedente de las balanzas de plataforma.
En el siglo
XV Leonardo Da vinci ideo un sistema con un cuadrante graduado y en dicho
cuadrante se indicaba el peso.
Otra
aportación novedosa fue la de Gilles de Roberval, que ideó un sistema de astiles acoplados de manera paralela.
Y ya centrándonos en el
mundo del correo si uno de los baremos para establecer las tarifas es el peso
del envío, en las administraciones de correos debían de disponer de balanzas
para pesar los envíos, y se conoce diversa documentación que hablan de
distintos instrumentos de pesos para las administraciones de correos, pero como
he mencionado anteriormente quiero centrarme en las balanzas franqueadoras de
svv.
El inicio
de la historia de las etiquetas postales se enmarca dentro de las políticas que
el Correo español acometió en el año 1979 consistentes en una serie de
actuaciones cuyo objetivo final era la mejora de sus procedimientos mediante la
modernización de sus servicios postales agilizando tanto el tratamiento de la
correspondencia, el siguiente año vio el comienzo de la indexación de los
envíos normalizados, como la atención a los usuarios cuyo primer hito fue la
puesta en servicio de las balanzas franqueadoras FRAMA, modelo SG, hecho que
acaeció a finales de ese mismo año.
Esta máquina estaba gobernada por un
microprocesador y los valores que emitía eran seleccionados mediante un
teclado. Después de hacer esta selección se emitía la etiqueta en la que
aparecía el valor de franqueo, la fecha de emisión, la hora y la localidad.
La fecha y la hora no era necesario
actualizarlos diariamente, estaban programados.
EPELSA BF 10C
Tras esa
inicial experiencia y continuando con este proceso en el año 1981 fueron
adquiridas a la empresa española “Equipos de Pesaje Electrónico, S. A.”,
abreviadamente “EPELSA”, hasta un total de 325 máquinas de un nuevo modelo que
fue identificado con las siglas BF – 10C, y cuyo desarrollo fue posible gracias
a la colaboración del “CDTI” - Centro para el Desarrollo Tecnológico e
Industrial que aportó 6 MM. de los 8 MM. de pesetas del coste global del
proyecto.
Este tipo de etiquetas
conocidas popularmente como “rojillas” estuvieron en servicio durante mas de 10
años (1981-1994), emitiéndolas mas de 100 balanzas diferentes, por lo que el
numero de etiquetas expendidas tuvo que ser elevado, varios millones o, incluso
tal vez, un par de decenas de millones, y sin embargo, han sido relativamente escasas las que se han
conservado.
La historia oficial de las
ETIQUETAS EPELSAS BF-10C comienza con la publicación en el Boletín Oficial de
Correos de fecha 2 de julio de 1981 de una disposición de la Subdirección
General de Correos fechada el día 29 de junio de ese año, concluye con el
inicio de su retirada masiva en el año 1992, acción que finaliza ya avanzado el
año 1994 con el cese de actividad de las ultimas balanzas en funcionamiento.
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